Más allá de los conocidos huertos urbanos y la técnica de hidroponía que permiten cultivar en entornos controlados sin depender de las condiciones externas, existe en el sector agroalimentario una gran corriente de innovación y desarrollo tecnológico que puede verse en el creciente número de startups en este ámbito, un buen ejemplo lo recoge el ecosistema emprendedor valenciano.
De esta forma ha aparecido una tendencia de creación de empresas que se preocupan desde la producción como Koroko que es la única tecnológica a la que Europa le ha permitido ‘pintar huevos’, mediante técnicas que permiten impregnarlos de olores o Insectfit , que se dedica a confeccionar productos alimenticios con insectos, The Meal Revolution que centra su propuesta en testear los productos directamente en contacto con el consumidor previo al lanzamiento y por tanto su viabilidad en el mercado y muchas otras ofertando nuevos modelos de distribución o de packaging eco-sostenible
La verdad es que existen apuestas muy interesantes e inspiradoras, podéis ver muchas más en el enlace, no tienen desperdicio.